Ésta es el relato de cómo terminé en las finales de la competición de té más prestigiosa de Taiwán, cómo me preparé, cómo quedé el último y cómo aún así gané más premios de los que podía imaginar. Y me llevé una importante lección de vida.
Abrirse a la vida suele significar hacer cosas que nos intimidan, dar pasitos fuera de nuestra zona de seguridad para “hacerla más grande”. A finales de julio de 2019 por recomendación de una amiga taiwanesa (que me lía siempre), decidí apuntarme a la “Competición de Cata en Doble Vaso Nacional de Taiwán 2019” 全國雙杯品茗泡茶比賽 que tomaría lugar el 7 de septiembre. No sé muy bien por qué lo hice, sería mucho trabajo pero creí que me alegraría de vivir la experiencia. Sería difícil por los nervios, pero ¿por qué no?
Qué hace un extranjero en una competición de té en Taiwán
Quizá por las circunstancias políticas de Taiwán o el propio carácter de la mezcla de cultura china y japonesa los taiwaneses son un pueblo muy abierto y acogedor. Esto se refleja en muchos aspectos de la vida aquí, cualquier extranjero que visite Taiwán lo notará. En esta competición a los extranjeros nos dejan ir a la final directamente sin pasar la clasificatoria previa. Imagino que además da publicidad y exotismo al evento. Por mi experiencia si hay algo que cualquier pueblo del mundo aprecia es un extranjero que se interesa y aprecia su cultura. Ahora entiendo mejor mi admiración por mi amiga Yosi, japonesa y profesora de flamenco. Esto cada vez es más complicado pues son actividades que necesitan mucha constancia y deben competir con la “cultura de la inmediatez”, teléfonos móviles y otras tecnologías e influencias más llamativas.
Volviendo al tema, si estás interesado en unirte a una de estas competiciones necesitas algún local que te informe y tenga los contactos para poder apuntarte. Pero si tienes interés es bastante sencillo y yo así lo he hice en el pasado con otras competiciones de Weiqi (Go) y de Kungfu.
Dentro del té, esta competición es la estrella dentro de Taiwán y tiene mucho prestigio por el esfuerzo y preparación que supone. Vaya como vaya te ayudará a darte a conocer en la escena del té de la isla. Se compone de 3 partes: examen escrito, preparación de té y preguntas.
Ronda preliminar
Para aprender asistí como público a una ronda preliminar clasificatoria. No participé, fue sólo para tomar nota de cómo se desarrollaba y tener una referencia. Parejas muy profesionales, muchos nervios y mucho más complejo de lo que me había imaginado. Tras ver la seriedad y el bien hacer de todos los asistentes no pude sino pensar “¡dónde me he metido!”. Pero no había vuelta atrás y quería ir a por ello, me sentía como el escalador que se encuentra en la base de la montaña dispuesto a dar el primer paso.
Auditorio de la clasificatoria de Taipei Jueces apreciando los chaxi Aunque me gustó mucho su actuación no se clasificó, creo que por usar un bol para preparar el té, más difícil que las hojas se abran bien. Los jueces son muy exigentes.

Cómo me preparé para la competición
Si bien una amiga me introdujo a la competición, fue su profesora quien “movió los hilos” para poder apuntarme y se ofreció a darme las clases. Sin cobrar y a cambio de seriedad y dedicación, un lujo que siempre me hace sentirme agradecido de mi buena estrella. El evento deja libertad creativa pero dentro de unas reglas estrictas y partes muy bien delimitadas. La preparación requeriría de mucho esfuerzo pues sólo con un gran dominio de lo que quieres hacer podrás hacer frente a los inevitables contratiempos.
Reglas
Las reglas y partes de la competición son claras y estrictas:
- Por la mañana antes del evento ofrecen probar el té de forma controlada.
- Hay un examen escrito de 1 hora.
- En el escenario, las parejas tienen 5 minutos para montar su mesa de té, su composición o chaxi.
- La actuación dura 20 minutos en los que se deben preparar 3 infusiones. Pasarte del tiempo establecido penaliza y terminar muy pronto no queda bien. La organización proporciona tanto el té como el agua que todos los participantes usarán.
- Tras la actuación debes explicar el tema de tu chaxi.
- Examen oral con una pregunta aleatoria de entre 30 temas.
- Hay un total de 12 jueces, 4 puntuando la calidad de las infusiones y 8 para el resto de los detalles: movimientos, chalü (asistente), composición del chaxi, etc.
Mi profesora
La familia de LinYin no tiene relación con el té, lo cual dice bastante de su carácter, dedicación y ser una mujer fuerte y hecha a sí misma. Durante el mes y pico que me preparé fui a su casa varias veces por semana con otra estudiante taiwanesa que, ella sí, se había clasificado en una ronda preliminar. Clases de 3-4 horas cada vez que pasaban volando con seriedad pero también entre risas y mucho té. Aprendiendo mucho.
Parece que con tener una profesora vale, pero quien te prepara debe tener experiencia en esta competición en concreto. Debe saber lo que funciona y lo que no y saber lo que quiere el jurado. Linyin lleva mucho tiempo en este mundo y conoce a todos los profesores, jurados y gente dedicada al té en Taiwán.
Lo peor sin duda fue tener que cargar casi a diario con toda la vajilla y otros elementos del chaxi (incluida la decoración) para familiarizarme con todo. De casa al trabajo y del trabajo a clase en metro con la maleta cargada y mucho cuidado. A veces dejaba cosas allí pero debía practicar en mi casa también.

La composición, el chaxi
El ChaXi 茶席 es lo más importante, la composición que quieres crear. Es el escenario de la obra que vas a representar e incluye todos sus elementos, incluidos tú y tu acompañante. Debes crear un ambiente único a la par que cálido para que lo que serían tus invitados se sientan cómodos. Incluso hay que bautizarlo con un nombre y tener un tema.
Mi chaxi fue muy sencillo pero muy elaborado para cómo suelo tomar yo el té. La mayoría de mis elementos fueron préstamos o regalos. Sólo compré los vasitos de aroma y tazas a juego que son muy baratos. Para ver cómo suelo tomar yo el té y poner un poco de alegría en tu día puedes seguirme en Instagram o Facebook.
El dinero, como siempre, es un factor importante y se nota quién se une por afición o quién cuenta con una familia con una larga tradición en el mundo del té y posibilidades. Siendo ésta la final de la competición de té más importante de Taiwán, los participantes que han llegado aquí o sus familias suelen estar relacionados con el té de forma profesional.
Pruebas de chaxi (I) Pruebas de chaxi (II) Éste funciona mejor Primera idea de Chaxi que no cambió mucho (y mi pequeño alijo de té al fondo)
Por lo visto más tarde y como solemos descubrir en la vida, algunos con más sufrimiento que otros, el dinero no debe ser la base. Por mi experiencia en la competición hubo dos tipos de chaxi:
- Tienes una idea en mente y adquieres los elementos necesarios para completarlo. Forma cara.
- Usas los elementos que ya tienes para crear algo con sentido. Forma barata.
Los chaxi de la competición como supondrás fueron increíbles. Teteras y hervidores (kettle) de plata, teteras yixing auténticas y antiguas de seguramente cientos o miles de euros, tazas a juego y piezas de colección de artistas taiwaneses de renombre. Composiciones imposibles de flores y otros arreglos, indumentarias personalizadas para la ocasión, etc. Hubo hasta una máquina de humo para crear efecto de niebla.
Chaxi con todo a juego, incluso la ropa Teteras de plata, elementos de diseño, etc
Mi acompañante, chalü 💘
Mi arma secreta donde sabía que no tendría rival. Durante la competición no estás solo pues una parte muy importante de todo el proceso es tu “asistente de té”, ChaLü 茶侶 . Las tareas del chalü son:
- Montar la composición contigo y desmontarla al terminar.
- Servir el té al jurado.
- Estar a tu lado mientras preparas, catar el té contigo y ayudarte.
Un papel tan importante como para tener un miembro del jurado dedicado y su propio gran premio. Un chalü puede ser de cualquier condición: amigo, familiar, mujer, hombre, etc. No importa, debe ser alguien con quien te sientes cómodo además de haber practicado mucho. Se evalúan la compenetración entre ambos, la gracia y los movimientos, los modales y sobre todo “ese algo” que hace a la pareja funcionar. Siendo mi asistente la persona con la que me casaría un mes después y llevando años juntos digamos que tenía ventaja. Y ya veréis que estaba en lo cierto.
La ropa de un Charen 茶人
No quiero caer en estereotipos, pero como hombre sencillo que no se preocupa mucho por estas cosas, una de las cosas más difíciles para mí fue tener que gastar un día y bastante dinero en ir de compras buscando “ropa de té”. Menos mal que tenía gente de sobra que me recomendó.
En Occidente llevar una camisa y pantalones estilo chino comprados en cualquier sitio quedaría muy impresionante y más que suficiente, pero estamos en Taiwán. Sería como comprar en una tienda de disfraces un vestido de flamenco para participar en una actuación en el Teatro Lope de Vega de Sevilla.
Se lo pasó mejor que yo
Hechas de materiales orgánicos y en estudios artesanales, aprendí que la ropa para un ChaRen 茶人 “maestro de té” es un sector nicho bien delimitado. Tejidos de calidad, orgánicos, naturales y nada baratos. Y no sólo para mí, sino también para mi chalü, claro. Por vergüenza no diré lo que me gasté… pero superó varios cientos de euros.
Competición Nacional de Cata en Doble Vaso, Taiwán 2019
El viernes 6 llegamos a 台南 Tainan, la “capital del sur” de Taiwán. Una ciudad acogedora y con una atmósfera más relajada que la frenética Taipei.
El sábado durante la inscripción coincidimos con los chicos de Global Tea Hut a los que no conocía personalmente. En 2019 dudé entre hacer un curso de 7 días con ellos pero al final elegí un retiro de Vipassana de 10 días. Si tuviera más vacaciones… Si no los conoces, Global Tea Hut son una organización muy interesante, su cabeza WuDe es un monje nacido en USA y ordenado en una tradición que utiliza el servicio y la ceremonia de té gongfu como medio para la meditación. Su forma de entender el té no es para todos pero es bonito saber que existen proyectos así. Me hizo mucha ilusión conocerlos y charlar con ellos, os recomiendo su revista mensual que está también disponible en formato electrónico de forma gratuita (en inglés). En la competición tomarían parte 2 parejas de Global Tea Hut.
Y así empezamos, tras un sorteo recibimos el número 9 de un total de 21. Actuando 3 parejas por ronda quiere decir que saldríamos en el tercer turno justo después de la hora de la comida. Lo cual parece que es muy buen lugar.

El té de la competición
El té elegido me comentaron que suele ser siempre similar, un oolong DongDing enrollado de oxidado y tostado medios, bastante ligero pero no muy especial. Esto es adrede, al ser un té bastante común depende del participante el prepararlo bien. Los tés excelentes da igual lo que hagas con ellos que en general siempre darán buenos resultados. Nos lo dieron a catar en la mañana pero no nos proporcionaron la ración para la competición hasta justo antes de salir.
Examen escrito
El examen se compone de 1 hora y 50 preguntas sobre historia, producción y procesado de té de respuesta múltiple. El temario a estudiar es de 300 preguntas. Por supuesto todo está en chino lo que hace que los extranjeros, menos los japoneses (caracteres similares, un poco más simplificados) y ciertos países asiáticos que estudian escritura china en la escuela, lo tengamos más difícil. Como deferencia nos permiten tener un traductor en el examen, pero esto hace que el tiempo corra en tu contra. Las parejas de Global Tea Hut que también participaron contaron con una traductora nativa, yo lo preparé por mí mismo y como tal fui solo.
Las preguntas van desde algunas muy sencillas como de dónde procede el té puer, dando a elegir, China, USA, Nueva Zelanda, etc. Pasando por los nombres y características de las variedades de té taiwanesas, orden de los pasos del procesado de todos los tipos de té, preguntas sobre la temperatura del agua en la preparación, materiales de la vajilla o preguntas de elegir la frase correcta.
A mí, más que por la dificultad de las preguntas en sí que había estudiado bien, me costó en base a su longitud pues en chino leo despacito y necesito tiempo para entender la frase (si la entiendo). Esto me lastró más de lo que creía y me dio la impresión de que eligieron todas las preguntas más largas del temario, quien no se consuela… Creí que lo había preparado bien pero no fue así pues sólo conseguí 62 puntos de 100.
Montar el Chaxi
Respiramos y subimos al escenario. Aunque los nervios del directo juegan malas pasadas pero, gracias a todo lo practicado y su sencillez, montar el chaxi no supuso un problema. Terminamos antes de lo habitual incluso añadiendo un par de extras para la competición: la caligrafía en el trípode y las flores de delante y de la mesa. Para que os hagáis una idea conté 35 elementos diferentes en mi chaxi. Lo más complicado quizá sea ajustar el mantel a la mesa con alfileres y dejar todo bien colocado, incluido que el agua arranque a hervir. Hay que tener mucho cuidado con todos los detalles.
Mi profesora me dio acceso a 2 composiciones florales preparadas por una maestra de ChaHua 茶花, “flores de té”.
Mantel, cada detalle es un mundo Motivo floral Chahua frontal Apreciando el aroma de la hoja en seco y pequeño y elegante Chahua
Preparación de té
Impresiona y es donde se aprecia la seriedad de la competición. Estar sentado en un teatro frente a más de 300 personas y una fila con 12 jueces profesionales con cuaderno, lápiz y dispuestos a apuntar cada movimiento que hagas.
Para la actuación, la organización proporciona una mesa con unas medidas que hace públicas un semana antes, 2 taburetes y la estufa para poner encima el hervidor y calentar el agua. Esto último a mí me confundió pues cada pareja trae preparado su propio hervidor que conoce. Llegó un momento que con los nervios yo no sabía si estaba apagado o encendido. Creo que en algún momento mi mente se quedó en blanco y sólo pensaba en terminar, no supe disfrutar de estar allí y la puesta en escena. Sentado desde el público pude ver Charen (maestro de té) con confianza y experiencia que genuinamente estaba disfrutando, daban ganas de bajar y sentarte con ellos.

Disponemos de 20 minutos para preparar 3 infusiones con las mismas hojas, recuerda que uno de los placeres del buen té es ver cómo cambia cada infusión. El jurado valora que las 3 infusiones sean de calidad y lo más similares posibles. No debe haber dudas en los movimientos y todo debe ser muy natural, incluso los errores. En cambio ¡yo estaba como un flan! Al menos creo que me lo tomé con filosofía, llegó un momento que no podía controlar el tembleque de mis manos y el tintineo de los vasos. Al echar la hoja en seco se me desperdigó por la mesa. Pero respiré hondo y me reí de lo absurdo de la situación, la mirada calmada de mi chalü me ayudó.
Lo peor es que me aceleré mucho. En la práctica con mi profesora tenía los tiempos muy bien controlados con el ritmo de los movimientos. Pero al ir más rápido de lo debido todo se acortó, incluyendo los tiempos de las infusiones. Y salieron las 3 muy desiguales, la primera casi sin sabor, la hoja apenas se abrió y las otras fueron algo mejores, pero sin arreglo. Mi asistente intentó frenarme alargando sus tiempos, pero no fue suficiente. Como era de esperar, siendo la preparación del té la parte central de una competición de té, al haberlo hecho tan mal cualquier esperanza se desvaneció. Cuando salieron las puntuaciones finales vi que habiendo preparado un té tan sólo correcto, habría quedado por la mitad de la tabla. Esto añadido a un examen bastante flojo.
Presentación del chaxi y pregunta oral
Creo que uno de mis puntos fuertes fue la naturalidad con la que tuve la idea de mi composición. Sin elementos caros ni forzados, esto es algo que fue criticado en muchos participantes, poner mucho énfasis en un chaxi “vacío”, con buena intención pero formado de piezas caras recién estrenadas.
Mi chaxi fue la historia de por qué vine a Taiwán y lo bauticé como “La Armonía de las artes” 藝術和諧. Usé una sencilla gaiwan, lo cual no es común pues técnicamente es más difícil de controlar y al estar hecha de porcelana no refina el té como una tetera yixing antigua ni mantiene igual la temperatura. Pero lo hice porque no quería cambiar el té, quería mostrarlo tal y como es. Lo más importante de tu chaxi es quién prepara el té, no los elementos usados. El azul predominante es mi color, pero fue dado por casualidad en el mantel y otros elementos que me prestaron. La caligrafía china es la primera que hice yo mismo cuando tomaba clases y que, modestia aparte, fue aplaudida. Si compras té en la tienda online o te unes al Club PruebaTé suelo escribir siempre algo a mano en pequeñas postales hechas de esta caligrafía, muy especial para mí. También añadí unas piedras de Go, Weiqi, el milenario juego de mesa que me hizo empezar a interesarme por Asia y puedo decir que me trajo aquí. Y aunque no tan visual, también estaba mi kungfu, el mismo gongfu de la ceremonia del té y que siempre llevo conmigo a todas partes.

Así llevaba bastante bien preparado en chino lo que quería decir y salió bien. Estoy bastante orgulloso de ser el único no taiwanés que no usó traductores para hablar, un pequeño consuelo.
La pregunta oral que me tocó fue explicar las características del té Tieguanyin. Es una pregunta bastante abierta porque la respuesta del temario es muy breve así que tienes que improvisar. Hablé sobre las diferencias del procesado entre el Tieguanyin de China y el de Taiwán. Las características de esta variedad, el color, aroma y sabor esperados. Historia de cómo llegó a Taiwán y áreas de cultivo.
- Té oolong TieGuanYin TradicionalDesde: 13,00€
La entrega de premios. ¿Quién ganó?
Tras concluir las rondas y apreciarse caras más relajadas en todos los participantes, el jurado se fue a deliberar el resultado. Mientras tanto se hicieron varios juegos para entretener al público entre risas y regalando té.
La entrega de premios fue más larga y elaborada de lo que me imaginaba, cada uno de los 12 jueces comentó sus impresiones señalando específicamente a participantes según su el área que juzgaban. Yo particularmente no salí muy mal parado menos en la calidad de las infusiones (lo más importante) y se deshicieron en elogios hacia mi compañera. Se hizo énfasis en que muchos chaxi “fueron demasiado”, refiriéndose al énfasis puesto en mostrar piezas caras sin cohesión dentro de una temática floja. También que algunos Charen que se notaba que tenían gran experiencia actuaron mecánicamente. Movimientos perfectos y al milímetro pero que se veían poco naturales, muy coreografiados. A mí me dejaron con la boca abierta, pero supongo que no es lo que se busca en estos eventos.

Los premios fueron generosos y voluminosos: piezas de alfarería, mucho té y dinero:
- 10.000 New Taiwan Dollar (300 euros, 330 usd) para el tercer premio.
- 30.000 ntd (900 euros, 1.000 usd) para el segundo.
- 50.000 ntd (1.500 euros, 1.700 usd) para el primero.
Y la gran sorpresa fue que ganó una maestra de té de la primera ronda, la mesa 1, ¡una japonesa! Fue gracioso porque por unos momentos se le quedó a todo el mundo la cara “como un poema”. Y es que una cosa es invitar a participar a extranjeros a la competición de té, tu cultura, más importante de Taiwán, para hacer la gracia y otra es que además ganen. Pero se pudo ver que la competición fue 100% transparente. Otras anécdotas fueron un empate en el 3er puesto y que la prestigiosa mención a la “mejor infusión” se la llevó una mujer de la China continental, lo cual no deja de curioso también y dice a favor de la organización. Los conflictos políticos no tienen ningún poder contra el té (aunque parece que pasó por alguna que otra dificultad para poder apuntarse).
Y como era de esperar mi chalü se llevó el premio a la “Mejor Asistente de Té Nacional 2019”. Sin dinero pero ¡con un carro lleno de té!


Y sobre la ganadora japonesa lo hizo muy bien como podéis imaginar, pero a destacar fueron su sencillez y su sonrisa. Lo más comentado fueron su calidez y desparpajo, que ser un invitado en su mesa de té habría sido un placer. Éste es el espíritu de la competición, servir la mejor experiencia de té.
Conclusiones
Aunque estuve triste, sensible y un poco plof por unas horas, pude aprender de mí mismo: que si me relajo puedo reírme ante la adversidad y de lo ridículo de la situación y cómo de difícil es controlar tu cuerpo y emociones en una situación un poco límite. Aunque quieras estar tranquilo, no puede forzarse, son “nudos” que deben deshacerse poco a poco con trabajo consciente reconociendo tus carencias y exponiéndote, sin huir. También me alegré muchísimo por mi ahora esposa que tiene un talento natural, nervios de acero y de la que tengo mucho que aprender.
El 99% de los problemas a los que nos enfrentamos en la vida son tan diminutos que sufrir es opcional: una maniobra de tráfico, una opinión negativa, una confusión y sobre todo nuestra imaginación del futuro y nuestra memoria de pasadas experiencias. Somos los dos extremos, por un lado seres insignificantes que viven en una diminuta esfera de polvo estelar que se desplaza a toda velocidad en un océano infinito de 100 billones de galaxias. Por el otro saber que nuestra vida es un milagro y que debemos celebrar cada momento que estamos aquí. Porque Carpe Diem no significa hacer locuras sino reconocer y disfrutar de cada instante.
Y aunque sin duda prefiero el estilo del señor Zhou, un evento tan exigente como éste te permite superarte. Quizá me vuelva a apuntar en unos años cuando tenga más experiencia sirviendo té públicamente. ¡Para cualquier pregunta sobre la competición no dudes en dejarme un comentario!
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